Llevo un tiempo para aquí con
muchas ganas de hacer este post, no es nada del otro mundo lo sé pero me
confieso adicta a ellos a verlos y a leerlos también, se trata de mi rutina de
mañanas para los días que solo trabajo per la tarde.
El día, tanto el mío como el de
mi hermana empieza a las 5:45h el
despertador suena y mi hermana se levanta para vestirse pues a las 7:00h ha de coger el tren para ir a la
universidad, yo por mi parte puedo holgazanear unos minutos más en la cama
hasta que oigo que ya casi esta lista y bajamos juntas a desayunar.
El desayuno suele constar de
café con leche y cereales o un cursan pequeño, aquí mi hermana se toma sus
vitaminas y yo mis pastillas de colágeno
para los ojos.
El desayuno dura hasta las 6:30h que dan el tiempo y es el momento
de salir escopeteadas a preparar las cosas que mi hermana necesita para clase,
yo de mientras la molesto y hago el capullo en general.
A las 6:45h ella se va y yo me visto, si tengo que ir al gym pues ya me
pongo la ropa de deporte si no, voy a la ducha y me pongo la ropa de calle.
Mientras me arreglo dejo siempre la ventana abierta para que se ventile la
habitación y poder hacer la cama.
Lo siguiente es trabajar un
rato en el blog, como una hora y media cada día si tengo tiempo. Busco
información o redacto contenido.
Después me pongo un rato con
las oposiciones, estoy hasta las 9:30h
si tengo que ir al gym porque la clase empieza a las 10:00h, si no toca ir al gym (que voy los martes y los miércoles
que es cuando hacen mi clase favorita) estoy estudiando hasta las 11.30 que es
la hora que recojo para prepararme para comer a las 12:00h.
Los días de gym como término a
las 11:00h solo me da tiempo a
ducharme y a decir un par de veces que me duele todo. En esta media hora entre
las 11:30h y las 12:00h me maquillo y lo dejo todo
arreglado para que después de comer solo me falte cepillarme los dientes,
ponerme colonia y salir por la puerta.
A las 12:45h ya estoy en la estación, arreglada y esperando a que llegue
el tren. Estos minutos suelo llamar a mi hermana (o me llama ella) para contarle
que tal la mañana, (nos llamamos aunque en un rato nos encontraremos en la
oficina jejeje) eso me ayuda a coger fuerzas para la jornada de trabajo.
Casi siempre hago esta rutina
con alguna variación si tengo que salir a hacer recados o algo parecido. Ya me
he acostumbrado a trabajar de tardes, al principio se me hacía un poco raro
pero la más activa por las mañanas las aprovecho mejor que las tardes y me
permite tener más tiempo para mí y los míos.
Espero que hayas disfrutado de
un poquito de mí día a día.
Gracias por leer y hasta la próxima.
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